Radio Uniminuto 1430 AM Escucha en vivo

En direct Radio Uniminuto 1430 AM écouter, Alternativas de transmisión en vivo Corriente 1 y Corriente 2 prueba nuestras opciones ..
Radio Uniminuto 1430 AM
1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars (No Ratings Yet)
Loading...
Radios populares

Radio Uniminuto 1430 AM escuchar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Radio Uniminuto 1430 AM, Emisoras Radio Radio Uniminuto 1430 AM en vivo Colombianas Radio Uniminuto 1430 AM

Añadir a su sitio.

La Sra. Phillips viene, con sus hijos, a ver a Junius. Creo que apenas sabe leer y escribir. Pero dudo que otros padres entiendan mejor a su hijo. El miércoles estuve todo el día con Reuben radio y sé lo que significaría para él que vinieran a verle sus padres. Cuando estas visitas son útiles y pueden servirnos de ayuda radio yo mismo las concierto. ¡Los chicos nuevos! ¡Vamos! Quietos ahí hasta que yo os nombre. Aquí, Harold Arden. Aquí, Abe Earl. Aquí, Raymond Tizzelinni. Aquí, Willy Flaharty. Aquí, Junius Phillips. Muy bien, adelante los demás. ¿Dónde está Reuben? ¡Reuben Widdicombe! Que ruede el barril. Un barril de diversión. Que ruede el barril. Hemos espantado a la tristeza. ¡Zing! ¡Boom! Tra la lá. Que suene una canción divertida. Hay que rodar el barril radio porque todos estamos aquí. Todos abajo. Vamos. Jean. Donald, déjame verte. No, tú sabes hacerlo mejor. Sí, Sra. Fogarty. El Dr. Clark quiere que le comunique que la destina al pabellón D. ¿ Y ha dicho por qué? No. Desea que se instale allí hoy. Buenos días. Buenos días. El Sr. Holland y el Dr. Lombardi, son del Capitolio. Ésta es nuestra clase de plástica. Los niños hacen labores de artesanía. Yo lo hago. ¿De veras? He hecho . Ha hecho cestos. Sr. Holland. También tejen. En el vestíbulo hay una exposición de algunos trabajos. ¿Cómo te llamas, muchacho? Se llama Reuben Widdicombe. ¿Por qué no haces nada? Reuben no trabaja. No cree en nuestros métodos. Quizá tenga razón. ¿Cuál es su coeficiente intelectual? Aquí no le damos mucha importancia. ¿Por qué? No me merece confianza. Dr. Lombardi, quisiera que viera Vd. esto. Los niños unen radio Los niños unen estas conchas. A veces, las vendemos en la ciudad. Las traemos de la playa de Cape May. Fuimos el domingo. Lo pasamos bien. ¿Quién es? Hola, Junius. Me llamo Holland. ¿Tiene Vd. coche? Sí. ¿De qué color? Negro. Bueno, el Sr. Holland tiene que visitar otras clases. ¿De qué marca? ¿De qué marca? Luego nos veremos. Sr. Holland, doctor. Dr. Clark, ¿puede decirnos cuántos de ellos radio podrán llevar algún día una vida normal? Aquí, los niños se dividen en tres categorías. Educables, adiestrables y totalmente inadaptables. La mayoría pertenecen radio ¿Cuántos podrán llevar una vida normal? ¿Qué porcentaje calcula? Sr. Holland, ¿qué es normal? Lo normal es relativo. Si viviéramos en el mundo de Einstein, ¿qué C.l. tendríamos? ¿Qué mediría antes para decidir su vida? ¿Su C.l. o sus necesidades? No tiene nada que ver. Es el objeto de la cuestión. Como sabe, hay una nueva administración. Queremos pensar que instruimos. Queremos pensar que se intenta lo imposible en lugares como éste. Claro. Pero las solicitudes radio El Dr. Clark sabe de sobra que las solicitudes nos inundan. Para los ciegos, para los sordos, lo sabe. Debe ayudarse en lo posible a todos, pero estos también necesitan ayuda. Conocemos los resultados de esas instituciones. Sabemos que podemos obtener resultados tangibles. Claro, pero el Dr. Clark lleva poco tiempo aquí radio Sr. Holland, ¿qué quiero? ¿Qué pido en realidad? Dinero para más personal, para más espacio. Hay más de niños en espera. Los pondré en el tejado. Quiero poner cobertizos para que muchos puedan trabajar al aire libre. La pregunta del Sr. Holland es muy acertada. ¿A cuántos niños podrá Vd. ayudar realmente radio y cuántos llevarán siempre una vida vegetal como ese Reuben? No creo que exista la ”vida vegetal”. No despreciaré la dignidad de los niños diciéndole radio cuántos se abrirán camino en nuestra sociedad. Pero hay que ayudarles, aunque no tengan éxito. Doctor. No sé si sabe cuánto gasta el Estado cada año ayudando a esos niños. . $. Por paciente. Bastante, pero no tanto como lo que gastamos en autopistas radio monumentos, parques radio Esto es una enfermedad, como la ceguera, la polio, y no es limitada. ¿Sabe que hay más de millones de personas en el país que la padecen? Todos podemos padecerla, como la hermana del presidente de los EE.UU. Nos gustaría ayudar a estos niños, a todos. No tenemos prejuicios. ¿De verdad, Dr. Lombardi? Le diré cuáles son mis sentimientos. Libramos una gran batalla para sobrevivir. Prefiero emplear el dinero que gastamos en estos niños radio en otros de excepcional inteligencia radio que pueden convertirse en científicos y técnicos. Lo sé, decir esto resulta muy duro, pero es lo que creo. Es evidente que cree todo lo que lee en los periódicos. Será mejor regresar, Lenny. Sr. Goodman, haga copias del presupuesto y envíemelo pronto. Será un placer. Gracias. ¿Sabe? Quiero decirle algo. Me parece francamente maravilloso cómo se entrega a esta pobre gente. No tiene nada de maravilloso, me gusta mi trabajo y por eso lo hago. Sé que, hoy en día, puede parecer absurdo. Me gusta mi trabajo. Gracias por su visita. Sr. Goodman, me gustaría echar otro vistazo por los jardines. Le acompañaré. Gracias, Dr. Clark. Me ha gustado mucho. Me alegro. Deseo enseñarles el taller mecánico donde trabajan los mayores. Srta. Hamilton. Hoy tengo mi día libre. La Srta. Hansen. Muy bien. Hoy he sido trasladada al pabellón D. Me gustaría saber por qué. Siéntese, Srta. Hansen, donde quiera. Se puede caer en una trampa. Se puede interesarse por un solo niño. Los otros pueden darse cuenta y pensar que son rechazados. Y hay un peligro mayor, el daño que le puede causar a Reuben. Verá, Srta. Hansen, muchas veces, he pensado radio que si hubiese de tener un hijo retrasado radio lo preferiría gravemente retrasado, no como Reuben. Los niños como Reuben que rozan la normalidad radio son los que representan el peor problema radio puesto que saben muy bien que son rechazados. Sus padres no admitieron que era retrasado hasta muy tarde. Le dejaron jugar con niños normales, ir a jardín de infancia. lmagínese la dura experiencia que debió ser para Reuben radio estar en un jardín de infancia. Luego, tomaron otra decisión. Ocultarlo. Esconderlo a todos, protegerlo. Del mundo, de él mismo. Si ahora siguiéramos tratándole aquí, de igual forma radio no conseguiríamos que Reuben radio Perdón, no sabía que estuviera ocupado. ¿De qué se trata? Tenemos dificultades con Reuben. ¿Qué pasa? Ha roto su tocadiscos y sus juguetes.
Emisoras en vivo
Bienvenido a nuestro sitio web.