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Deberías ver lo que pasa cuando no hago la cama. Estoy parada aquí. Gracias. ¿Hola? No me digas que estás en el escritorio de Harvey. Pasaba por aquí. Contesté por los viejos tiempos. Sabías que era yo, ¿no? Supongo que quieres saber si Harvey tiene tu dinero. Sé que lo tiene. Quiero saber cómo hizo que Vic vendiera. ¿Cómo ? ¿Crees que ocultaría tanto trabajo sin registrar todos estos años sin que yo lo supiera? Supongo que no. Y lo que hizo que Vic vendiera fue decirle la verdad. Era momento de avanzar. Dile que dije gracias. Te extraño, Jessica. Yo a ti, Donna. Y también extraño al resto de los tontos. No te atrevas a decir que dije eso. Ni en sueños, Pearson. Gracias, Paulsen. Harvey. Sé que necesitas tiempo para procesar lo que dije, pero no puedo esperar. Entiendo. Pero si viniste a disculparte No. Vine a explicar. He pasado por algo los últimos días. Aceptando el hecho de que el legado de mi padre desaparecerá. Donna vino a hablar de eso. Ayudó porque es parte de mi vida, Paula. Y me gusta que sea parte de mi vida. ¿Por qué me dices esto? Porque dices que no te sientes amenazada por Donna, sino porque no comparto contigo. Bueno Estoy compartiendo. Te agradezco, Harvey, y tal vez no compartí bien contigo porque me siento amenazada por ella. Y cuando no me dices estas cosas Fue hace años. Yo era una persona diferente. He llegado muy lejos. Hice las paces con mi mamá y tú eres quien me ayudó con eso, no Donna. Y aunque agradezco que Donna venga y hable conmigo tú eres a quien quiero ahí. Como dije, no te ofreceré una disculpa. Solo te digo por qué son así las cosas. Así que la pregunta es: ¿Aún quieres venir conmigo? Sí quiero, Harvey. Sí quiero. ¿No puedes dejar de salir con Litt? Es un perdedor. No es un perdedor, Drake y me gusta. Sí, es dulce, amable y lindo. ¿Por qué no sales con él? Porque él puede ser lindo, pero no es un chico malo. Y me gustan los chicos malos. Sí, te gustan. Louis. ¿Qué haces ? Iremos a tu edificio ahora. Pensé Pensaste mal. Estoy listo para ser tu chico malo. Cuando estemos arriba, irás directo al clóset. No. Iremos a tu oficina con nuestras cabezas en alto. Y estaremos ahí cuatro horas, y no cerraremos la puerta. En realidad eres un chico malo. No, Sheila.
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